En líneas generales, la Segunda División actual poco ha cambiado en conceptos básicos a las competiciones que la UD Las Palmas conoció antes de sus ascensos de 2015 o 2023: Es una liga abierta a candidaturas, un escenario para la aparición de nuevos valores y la batalla es innegable en los 42 episodios de su calendario. Pero existe una casilla en la labor de los conjuntos que marca la diferencia: La fiabilidad defensiva.

Precisamente ese fue un aspecto del juego en el que fallaron los dos rivales que este lunes se miden en el Nuevo Arcángel durante sus partidos inaugurales. Iván Ania se quejó de los despistes de su equipo en el partido de El Molinón contra el Sporting, mientras que su colega de la UD, García Fernández, también habló del tanto encajado frente a un Andorra que “ni siquiera había tiró a puerta para empatar”, dijo.

Esos dos equipos son los que cerrarán la segunda jornada y ambos con ‘necesidad’ de lograr la victoria. En el caso de la UD Las Palmas, ese triunfo haría sentir que tiene los pies en la tierra y que su recuperado modelo de juego ya logra asentarse con criterios y marcadores.

No será un encuentro cómodo para ninguno de los dos. En la ciudad del Califato, la UD va a encontrar a un rival animado por más de 17.000 abonados. Esa cifra convierte al Córdoba en una de las referencias locales de la nueva competición. Si Las Palmas quiere asaltar el Nuevo Arcángel deberá mejorar sus prestaciones de ataque y anular las concesiones defensivas. 

Los futbolistas de García Plaza van a encontrar a un rival que destacó en la primera jornada por su alta capacidad de control del juego a través de la posesión: El 64.1% cordobés es un dato muy llamativo, que sin embargo supo deshacer el Sporting.

La segunda formación titular de los amarillos tiene una plaza señalada: El relevo del lesionado Iván Gil, motor del equipo durante el verano. Para esa plaza hay varios candidatos, incluso Jonathan Viera, que podría reaparecer ante un rival al que no logró ganar en sus dos precedentes personales. Y en un estadio donde resultó expulsado en el descuento por agredir a un rival. Ese día también fue aciago para Vitolo al malograr un penalti. Aquello ocurrió en sus orígenes profesionales con la UD. Aunque no estaría mal saldar cuentas.