Facundo Leal (Argentina, 1975) se ha convertido en una de las piezas clave del engranaje técnico del CV Guaguas. Afronta su cuarta temporada en el banquillo del CV Guaguas asumiendo un papel que combina dirección técnica y análisis profundo del rival. Su trabajo comienza en la pista, donde se encarga de los ejercicios iniciales de activación y del entrenamiento específico de recepción con los receptores, antes de que el primer entrenador, Sergio, tome el relevo.

Durante los partidos, Leal maneja una tablet conectada a los datos suministrados por el fisioterapeuta del equipo, información que procesa en tiempo real para trasladar a Sergio cualquier patrón relevante durante los tiempos muertos o al finalizar cada set.

Fuera de la pista, su labor continúa con una dedicación constante. Desde casa, Leal mantiene contacto permanente con los clubes de la Superliga y, ahora también, con los equipos de Champions. Trabaja con el sistema Datavolley, donde organiza ideas, anotaciones, patrones de juego y archivos tácticos que alimentan el proceso de toma de decisiones.

A lo largo de la semana, suma a esta labor las sesiones de vídeo, la analítica individual de cada jugador y una comunicación fluida con el cuerpo técnico, un trabajo "diario y exigente", como él mismo explica.

El análisis que realiza influye en la planificación estratégica del Guaguas, aunque las decisiones finales "siempre las toma Sergio". La atención se centra en la distribución del colocador rival, en las tendencias del opuesto y en las pautas ofensivas y defensivas del contrario.

"El juego se basa en el análisis previo", afirma Leal, consciente de que el rival también trabaja con sus propios datos. En la Champions, asegura, el proceso analítico no cambia: la diferencia es que los partidos de vuelta ofrecen una lectura más clara del oponente tras ya haberse enfrentado previamente a ellos.

En cuanto a la identidad del Guaguas, Leal destaca que el equipo atraviesa uno de sus mejores momentos, especialmente en eficacia ofensiva, con un 55% de eficiencia en ataque. Recuerda que en voleibol las únicas acciones que dan puntos directos son el ataque, el saque y el bloqueo, y que el club está creciendo especialmente en la fase de break point, momento clave para presionar al rival cerca de la red y generar opciones de bloqueo.

Consciente de que la estadística no explica por sí sola la evolución de un jugador, el argentino defiende que su trabajo es un complemento, no la única herramienta. Su vínculo con la analítica comenzó en 2009 en Argentina, cuando pocos profesionales se dedicaban a esta especialidad. Desde entonces, no ha dejado de formarse.