Ricardo Pereira Pérez de los Cobos, jefe de los Servicios de Arquitectura, confirmó este jueves que las primeras demoliciones de la obra de reforma del Estadio de Gran Canaria comenzarán en noviembre. “Actuaremos en la Torre Este y en el cilindro (pirulo) de esas inmediaciones. Se demolerán cinco de los ocho pisos del edificio”.

Esta novedad se hizo pública en el transcurso de un acto del Instituto Insular de Deportes en Expodeca, Santa Cruz de Tenerife, en el que se presentó el proyecto de reforma del recinto que acogerá la Copa del Mundo. 

Aridany Romero, consejero insular del Cabildo, comentó que “el Cabildo de Gran Canaria es la institución pública de Canarias que más invierte en deporte” y que “el Estadio de Gran Canaria será el tren de las instalaciones de Canarias”.

“Queremos transformar el Estadio de Gran Canaria para que de una vez, después de 20 años, será un estadio de fútbol”, afirmó. En este sentido Ricardo Pereira afirmó también la nueva distancia de las gradas Naciente y Curva con respecto al campo de juego: “Actualmente están a 41 y 37 metros. Pasarán a estar a 10 metros”, desde la última butaca del espectador a la línea de cal. “Las gradas nuevas que se van a ejecutar tendrá una pendiente superior a la actual, aunque no llegará a ser como las del Bernabéu”, expresó.

Habló también sobre el “objetivo de la reforma: terminar el estadio con la concepción de fútbol clásico. Que tenga un uso diario y no cada fin de semana. Y que sea un referente energético”.

Descubrió detalles ya conocidos sobre la reforma que “durará entre 30 a 36 meses y terminará en julio de 2029”. 

Recordó que los vestuarios serán trasladados a la zona de tribuna, que tras la demolición de la grada Naciente se creará un espacio de oficinas y un centro de innovación para el deporte y descubrió el uso interno de la grada Curva. “Esa grada actual es un muro de contención. Se creará un espacio multiusos con la nueva Grada Curva que se va a construir, con valoración polivalente para sus usuarios”.

Hizo hincapié en el nuevo diseño de todo el estadio, con especial atención a la grada Sur y a su rostro cara a Fondos de Segura, donde se crearán locales comerciales con uso diario “sin necesidad de abrir el recinto al público”.

Sobre el césped es que “mantenga lo que funciona, con permiso de la FIFA”.