Era Manu Fuster (28) uno no de los jugadores más esperados en su debut en Primera División durante la recién finalizada campaña. Su notable concurso con el Albacete Balompié en los años precedentes, siendo uno de los picos individuales de la Segunda División, avalaron la contratación hasta 2028 por el equipo amarillo.

Pero el centrocampista valenciano no está satisfecho con lo propio y con lo colectivo. Ha sido Fuster buen analista sobre los acontecimientos de la campaña 2024-25, expresando opiniones públicas sinceras. Por ello no debe haberle convencido el que fuera solo 8 veces titular, no tener continuidad con Carrión o Martínez y dejar números realmente discretos para un futbolista con tanto teórico potencial: 28 encuentros, 20 incompletos, 2 goles y 1 asistencia.

El Manu Fuster que esperaba la afición de la UD Las Palmas debió parecerse al que cerró su año en el Carlos Belmonte con 8 goles y 11 asistencias, actuación en los 42 partidos de la liga 2023-24, de los que fue 40 veces titular. Mejoraba los 8 goles y 6 asistencias del año anterior, dirigido entonces por Rubén Albés hasta las semifinales del play off.

Manu no lo habría querido así, pero ahora está en la antesala de la categoría que conoce bien y en la que puede ser un jugador tan importante en la UD Las Palmas como lo fue en el Albacete, en donde llegó a ejercer como capitán.

Las Palmas de 2025-26 va a requerir una apuesta propia de un Fuster vertical, rápido, con capacidad de combinar y también rematador. Y la Segunda División le exigirá el sacrificio del jugador con vocación de atacante que regrese para defender. Si Fuster logra reencontrarse, la apuesta realizada por él cobrará otra vez sentido.