Fotos: C. Torres

Tras un tercer cuarto nefasto -un parcial de -19 (15-34) y sólo tres canastas en juego-, el Gran Canaria vio escapar la primera victoria del curso en Siete Palmas. Los de Lakovic, dominadores del marcador en la primera mitad del partido, cuando llegaron a ir 14 puntos por delante en el marcador (41-27), se deshicieron como la espuma tras la vuelta de los vestuarios; y aunque nunca arrojaron la toalla, el Unicaja supo sacar tajada de esos diez minutos tras el descanso para llevarse el ‘gato al agua’ a base de buena defensa y aprovechar los errores en los tiros libres locales. El Unicaja se llevó la victoria final (72-81), aprovechando el bajón isleño y dejando una sensación de impotencia cuando parecía cerca un resultado a favor.

Le costó al partido encontrar una anotación de cualquiera de los contendientes. Y aunque fuera el  Unicaja el primero en perforar el aro rival a minuto y medio del salto inicial, y tomar distancia con triple de Balcerowski, en el minuto seis de partido, los de Lakovic tomaban el control por primera vez (10-9) y afianzado en una buena defensa consolidar una pequeña fuga en el partido (21-13) antes de llegar al primer cierre de cuenta atrás (22-16).

En el segundo cuarto, el Granca empezó más atascado. El partido, trabado en ataque, se mostraba más productivo para los de Ibón Navarro, que se ponían a dos puntos (24-22) justo antes de que Tobey oxigenaaa a los amarillos con un tiro de tres (27-22) y una jugada de conexión con Angola (29-22).

Todo ello llevó a que los locales empezaran a revelar buenas conexiones y con ello, alargar por primera vez la renta hasta los 10 puntos (34-24) a 2:54 del descanso. Ponía así en entredicho a un Unicaja sin acierto exterior y con cara de zapato a su entrenador cuando presenciaba en el marcador el +14 local (41-27) a 45 segundos de que se tuviera que ver con los suyos en el vestuario.

La vuelta del picnic mostró un Unicaja más resolutivo que en el primer tiempo. Con defensa de presión sobre la subida del balón de los amarillos, los de Navarro tomaban las riendas del ‘tempo’ del partido para que, como resultado, redujeran las diferencias en el marcador (44-36). En este “nuevo encuentro”, la victoria se mostraba visitante con un parcial (7-24) que sonrojaba a los locales cuando volvía a verse a remolque en el marcador (48-50) con menos de 13 minutos por disputarse.

Necesitaba endurecerse el equipo amarillo en su defensa para responder a la ‘agresividad’, bien entendida, mostrada por el Unicaja que doblaba en el cuarto al Dreamland. Pero a la carga de los triples visitantes, ahora sí anotados con suma facilidad, se le sumaba falta de puntería en los tiros libres locales (53-61).

Con el marcador en contra y las sensaciones en peor estado, al Granca le costaba reaccionar incluso con su mejor quinteto en pista. La paciencia fue uno de los antídotos, pero el virus que había plantado el Unicaja en las venas amarillas era demasiado destructor y pasaba factura en los tiros libres. Con constancia, el equipo de Lakovic se mantenía en el partido (65-68) cuando los cajistas, aprovechando la ineficacia en el tiro libre del Dreamland, volvían a meter presión (65-76) con la alarma de fina de partido más cerca de sonar.

Alineaciones:   Gran Canaria(22+19+15+16): Albicy (4), Wong (7), Brussino (12), Labeyrie (16), Tobey (14) –equipo inicial-, Maniema, Vila, Samar (5), Salvó, Pelos, Kuath (4) y Angola (10).     Unicaja Málaga (16+11+34+20): Perry (8), Pérez (7), Duarte (8), Webb (9), Balcerowski (17) –equipo inicial-, Kalinoski (4), Barreiro (2), A. Díaz (9), Castañeda, Sulejmanovic, Tillie (11)y Kravish (6).   Marcador cada cinco minutos: 8-7, 22-16, 27-22, 41-27, descanso, 48-40, 53-61, 65-68 y 72-81.   Árbitros: Óscar Perea, Alfonso Olivares y Cristóbal Sánchez. Técnica a Miquel Salvó (m. 27). Eliminado Kuath por faltas (m. 39).   Incidencias: Segunda jornada de la Liga ACB. Pabellón Gran Canaria Arena. 7.233 espectadores.