La UD Las Palmas no pudo conquistar este sábado su tercer Trofeo Teide, aunque regresa a Gran Canaria con derrota en la tanda de penaltis y una colección de patadas. Los amarillos dominaron en el marcador durante 92 minutos tras el gol inicial de Iván Gil, pero el Tenerife igualó en el descuento (1-1 resultado final), para luego alzar la bonita escultura en la tanda de penaltis. Mata y Manu Fuster fallaron dos lanzamientos en una serie impecable para el equipo blanquiazul.

El derbi respondió a lo que es un partido de rivalidad canaria; así fue antes del inicio y desde el primer movimiento del balón. Prometía fuego real, como si de un partido de competición se tratara. Por momentos, en exceso los golpes innecesarios, que llegaron a molestar al banquillo amarillo incluso con la expulsión del auxiliar Yepes.

El Tenerife fue quien primero abordó el área rival. Lo hizo hasta en tres oportunidades, con varias acciones de Alassan por el costado derecho. Pero los disparos de Nacho Gil -dos- y De Miguel los rechazó Dinko Horkas, no sin apuros.

El Tenerife quería poner en aprietos la salida de balón amarilla, como ya ocurrió en los partidos de Marbella. Y, por momentos, la propuesta de Cervera le permitía activar las señales de alarma en la UD Las Palmas.

Pero a los 12 minutos, Las Palmas se puso por delante en el marcador. Fue en una jugada con cuatro movimientos de balón tras el saque de una falta en zona defensiva: Mármol a Alex Suárez, este en profundidad hacia Recoba. El uruguayo, de espaldas, toca con la espuela el cuero convirtiéndose en una exitosa asistencia que Iván Gil supo aprovechar.

El amistoso se puso en pie para los amarillos, que controlaban muchas facetas del juego. Las incógnitas para García Fernández seguían en su juego inicial, donde el Tenerife insistía en cortocircuitar los pases defensivos. El único gol del encuentro fue el que decoró el partido hasta el descanso, aunque pudo el conjunto de Álvaro Cervera igualar el partido en dos acciones que volvió Horkas a desbaratar con sus oportunos guantes. La segunda de ellas acabó en gol, pero anulado por fuera de juego de De Miguel.

En la segunda parte comenzó la ruleta de cambios. La segunda oportunidad clara para los amarillos llegó antes de la hora, con un remate forzado de Mata que salvó el portero Vuyts, recién incorporado al juego, que evitó el gol en una doble intervención.

Las Palmas pareció más cómoda en la segunda parte, ante un Tenerife que había cambiado todas sus líneas. De Vuyts vio muy cerca la posibilidad del 0-2 en el minuto 69, cuando Iván Gil volvió a probar a distancia y el balón se fue junto al poste tras acariciar levemente la cepa.

El guardameta canterano del Tenerife volvió a acreditar sus reflejos a los 74 minutos cuando metió el guante a tiempo para rechazar un ‘pejiñazo’, en una jugada típica del barbateño abriéndose un hueco en la frontal del área.

En el último suspiro, con juego directo hacia el área, el Tenerife logró forzar los penaltis con un tanto en el minuto 92 tras un disparo de Fran Sabina. Todo cambió en un instante y empeoró después en la tanda de penaltis, donde los errores de Jaime Mata y Manu Fuster resultaron determinantes.