Mereció más Las Palmas que el empate (1-1) cosechado este domingo en el Alfonso Murube de Ceuta. Los amarillos lograron lo más difícil, adueñarse del patrón del encuentro y adelantarse en el marcador haciendo valer su estilo sobre el fogoso conjunto norteafricano. El gol de Enrique Clemente campeaba con autoridad, pero en un gesto de calidad Matos empató el partido a pocos minutos de la conclusión.

La noche ceutí comenzó con un susto a los 33 segundos. Marvin Park sacó bajo palos un disparo de Marcos que culminaba la primera oleada del conjunto local que salió más enchufado al campo que los amarillos. Repetiría el goleador a los 6 minutos con un disparo desde el exterior del área que recogió en dos tiempos Caro.

Las Palmas consiguió enlazar con el balón pasados algunos minutos, cambiando la cara de un partido que había comenzado en dirección a Caro. A través del balón comenzaron a generarse jugadas bien defendidas por el equipo local.

Los dos estilos ya estaban para entonces definidos, con un Ceuta que quería riendas sueltas en el juego y una UD tratando de tener mayor precisión, aunque con dificultades para encontrar zonas de remate: Comida rápida frente a cocción lenta, más elaborada y con necesidad de más ingredientes.

La primera intervención del portero Vallejo llegó a los 20 minutos, tras un testarazo de Barcia a la salida de un córner.

El segundo susto de la noche llegó a los 32 minutos, tras un balón bombeado y que no fue despejado correctamente. El cuero llegó a Matos, quien disparó fuera cuando estaba en solitario. 

Cambio de viento

En el último tramo de la primera parte pudo adelantarse Las Palmas con dos sacudidas al guion. Jesé selló un contragolpe en el 38 con un disparo algo desviado desde fuera del área. Y un minuto después era Viti quien llegó hasta la línea de fondo, ofreciendo un balón que no encontró destinatario. 

De esas jugadas de larga fabricación llegó el 0-1 en el inicio de la segunda parte, obra del goleador lateral zurdo Enrique Clemente. Del toca, toca, toca … al pase de Amatucci a Clemente, ya dentro del área, para que el zurdo maño anotara el tercero de sus goles de esta temporada.

La posibilidad del 0-2 estuvo merodeando durante algunos minutos con ocasiones malogradas, especialmente una de Mármol y otra de Lukovic. Ocurrió instantes antes de que Viera solicitara el cambio por molestias.

El conjunto de García Fernández no tuvo problemas en asumir el rol sufridor en los minutos finales, con labores de sabotaje al intento ceutí de encontrar un gol para la igualada.

Cuando todo parecía perdido para el Ceuta, Matos anotó un gran gol para el Ceuta a las puertas del final del partido en la única ocasión que tuvo en la segunda parte. Hubo más mérito del remate que oportunidad real.