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Análisis de los 8 primeros encuentros

Nunca antes 6 derrotas de salida

Tampoco en su historial de Primera, la UD Las Palmas había cedido tres partidos a sus rivales de cuatro partidos como conjunto local. Las luces en ámbar parpadean

  • ENTRE BASTIDORES
  • 18/10/2017 - 11:31
Nunca antes 6 derrotas de salida Los rostros de Manuel Márquez y Paco Ayestarán al terminar los partidos frente a Leganés y Celta (C. Torres)

Manuel Borrego

Hay mucho trabajo por delante en la UD Las Palmas. Una labor que no debe despreciar el riesgo que siempre se contrae con una Primera División que no perdona despistes o relajación.

Es ahora el equipo el que debe levantar a su entorno, que vive una etapa de frustración y que advierte un futuro incierto.

El repaso del primer parcial de ocho partidos en Primera División, en todas las temporadas en que la UD participó en ella, confirma esos datos preocupantes que hablan de una trayectoria que requiere una reconducción. Los indicadores en ámbar son claros:

* Nunca antes la UD Las Palmas había encajado 6 derrotas en las ocho primeras jornadas.

Los peores datos corresponde a cinco pérdidas en 1951-52 (año del debut), 1975-76, 1985-86 (tras regreso a Primera), 1987-88 y 2015-16. En este último ejercicio mencionado, tras 1 victoria, 2 empates y 5 derrotas se produjo el cese de Paco Herrera, el hombre del ascenso ante el Zaragoza meses antes.

* Nunca antes tres derrotas de cuatro partidos como local.

* 18 goles encajados en esa misma fracción de encuentros representan la cuarta peor cifra de los amarillos en salida a competición

Encajó 29 goles en 1957-58 (entre otros 0-7, 1-6 y 9-0 frente a Barcelona, Celta y Atlético de Madrid respectivamente), 22 goles en 1951-52 y 20 tantos en 1954-55

* 7 goles a favor es el segundo peor inicio goleador, tras los firmados con 6 en 1959-60, 1973-74, 1982-83 y también en 2015-16.

Algunos de esos datos deficientes tuvieron un mal final, con descenso, otros no, aunque sí con agonía para lograr la salvación.

El equipo debe encontrarse a sí mismo ya en plena batalla algo que, de momento, no han podido solucionar Márquez y Ayestarán. Todo pasa de inicio por volver a hacer del Gran Canaria una fortaleza, con el apoyo de los incondicionales.

El recurso del relevo, primero, ya se efectuó. Pero las luces siguen parpadeando.