
Las características de Marko Livaja -salvando las distancias- refrescan en Barranco Seco el aroma a Turu Flores, justo veinte años después del fichaje más mediático en la historia de la UD Las Palmas
M.B.
No existen dos jugadores iguales, simétricos. Existen similitudes, parentescos, aromas, ... La caligrafía futbolística de cada individuo es propia, reconocible. Justo veinte años atrás, en la penúltima semana del mes de julio de 1996, la UD Las Palmas estaba procediendo a presentar a su fichaje más mediático del Siglo XX, al jugador más caro de su historia en aquel momento (567 millones de pesetas) y que iba marcar dos años de alegrías en el Estadio Insular. Era Turu Flores, procedente de Vélez Sarsfield.
Dos décadas después, se ha incorporado al club grancanario un delantero del que hay grandes expectativas como entonces, si bien el club no ha realizado desembolso económico alguno para convencerle. Marko Livaja ya empezó su rodaje como miembro de la actual plantilla de la UD Las Palmas. Le falta coger la forma, pero además de los informes técnicos que ya poseía la comisión deportiva, el delantero internacional croata ha impresionado a su llegada por su poderío físico. Hasta el punto de que Quique Setién, en las primeras revisiones del nuevo jugador, habría comentado antes de su llegada que por sus características y físico, por la manera en que proteger el cuero, es hombre útil para el juego de espaldas a la portería. Y, cómo no, para más misiones ofensivas que se las explicará.
Livaja es una esperanza de gol en la UD Las Palmas, donde ya se alimentan expectativas con un renacido Sergio Araujo y la siempre original versión del jugón Jonathan Viera. Marko se presentó este miércoles en el césped de Barranco Seco y el aroma a Turu Flores es inconfundible.

Su punto de gravedad es también bajo, pero no tanto como el argentino de Vélez. El tren inferior es potente , con su cuerpo aísla el cuero del adversario con oficio y, además, tiene buen manejo del balón. Habrá que verle mucho más, especialmente en su relación personal con el gol, cuando esté en las mejores condiciones posibles. Pero la comisión deportiva advierte en él un potencial a explotar con apenas 23 años de edad no cumplidos. Hay en él, según los informes, genio, carácter y también potencia física. Toni Cruz no dejó de subrayarlo horas antes en su presentación, advirtiendo que Livaja tiene un amplio recorrido por descubrirse en el fútbol español, tras curtirse en el Calcio.
Marko contactó esta tarde apenas con el balón asociándose pronto. Sus compañeros le arroparon en la llegada. Y en las primeras acciones, el recuerdo brotaba inconfundible con el argentino que caracterizó aquella época tras el ascenso a Segunda A.
Marko no es alto como el Turu, pero es oportunista con la cabeza; maneja la diestra con preferencia pero se le ha visto rematar desde distintas posiciones y piernas. Es fuerte y ahora debe interpretar el fútbol que propone el preparador cántabro de Las Palmas.
En la UD se frotan las manos. El presidente Miguel Angel Ramírez y el secretario técnico Luis Helguera fueron a verle a Barranco Seco. La sonrisa de ambos descubría la satisfacción interna de una prometedora incorporación que viene sin nombre para el aficionado amarillo, pero si los informes se plasman en la realidad, delantero tenemos.




